La consejera nacional de Morena, Leovigilda Chávez Hernández acusó imposición en la dirigencia local de ese partido y descalificó el nombramiento de Othoniel Sánchez Pineda.
En entrevista, luego de que el sábado Sánchez Pineda rindió protesta como dirigente de Morena en Zihuatanejo, la también consejera secretaria de derechos humanos del Comité Estatal aseguró que ese tipo de acciones provocan que el partido “se vaya al carajo” y no abonan para que aterrice la cuarta transformación en Guerrero.
Subrayó que dicho nombramiento se trata de imposiciones de arriba y se dijo extrañada porque “había ahí abogados y gente del partido que saben que ese no es el proceso para cambiar los órganos de dirección y aún así respaldaron ese supuesto nombramiento”.
Recordó que hay muchos oportunistas que piensan que sólo hay que hacer lucha social para llegar a ser dirigentes del partido, pero que no han trabajado dentro de Morena.
Recordó que en Zihuatanejo se tiene una sentencia del Tribunal Electoral Federal de homologar los padrones de militantes y por ello desde el pasado 3 de abril se inició el proceso de afiliación
“Tiene que haber un Congreso Nacional y realizar el proceso de afiliación institucional, ya que de lo contario no se pueden hacer cambios en las dirigencias”, remarcó.
Insistió en que para que Morena pueda ser un partido sólido tiene que ser institucional y actuar con la verdad “no estoy de acuerdo que cualquier gente venga y se ponga la camiseta de Morena y venga a descomponer o acarrean agua para su molino”.
Agregó que quienes decidan seguir en esa ruta sólo le están apostando a la división y a la malformación del partido.
Le recomendó a Sánchez Pineda “que trabaje, pero me da lástima que se den las cosas así, que sólo con un papel se digan dirigentes y ni los artículos se sepan”.
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