Un par de hombres prendieron fuego al Antimonumento a los 43 de Ayotzinapa, colocado en memoria de los estudiantes desaparecidos de la escuela normal rural Isidro Burgos en la ciudad de Chilpancingo, capital del estado de Guerrero.
Algunos normalistas acudieron a limpiar los restos de lo ocurrido, presuntamente por la muerte de un profesor de artes marciales hace un año en un accidente que involucra a los estudiantes de esa normal rural.
En redes sociales comenzó a circular un video en el que se observa cómo dos personas se plantan frente al antimonumento ubicado sobre la avenida Lázaro Cárdenas, lo mojaron con gasolina y le prendieron fuego. Una vez que el antimonumento quedó en llamas, los desconocidos bajan de la estructura y regresan al automóvil. Hace un año se generó una acción similar, cuando desconocidos cubrieron con petróleo el antimonumento y lo dejaron manchado.
“Asesinos”, “Bocho”, “17 de septiembre no se olvida” y “Vivo lo chocaron, vivo lo queremos”, se leía, previo a que acudieron a limpiar esta figura.
En un mensaje emitido en redes sociales, una persona que se identificó como hijo del maestro Jacinto Palacios Celino, que murió en el accidente del 17 de septiembre de 2021 pasado, agradeció a quien haya causado los daños y aunque dijo que su padre no le enseñó a hacer eso, “ganas de eso y más” le sobran.
En septiembre del año pasado, se registró el accidente en el libramiento de cuota Chilpancingo-Tixtla que involucró a uno de los autobuses en los que viajaban estudiantes de la normal rural Raúl Isidro Burgos Ayotzinapa y un vehículo Volkswagen compacto.
El profesor Jacinto Palacios y su acompañante Raquel Acosta Ayala viajaban procedentes de la cabecera municipal de Tixtla, para concretar la venta de un vehículo. Cuando regresaban a Chilpancingo fueron embestidos por un autobús que invadió su carril en el libramiento Chilpancingo-Tixtla, quedaron prensados y posteriormente se calcinó el auto; en ese momento los ocupantes del autobús lo abandonaron en el lugar.
Por este hecho, los normalistas son señalados como responsables de la muerte de ambas personas, sin que hasta el momento haya avances en la investigación iniciada por la Fiscalía General del Estado.
De manera reciente, el antimonumento, colocado en la glorieta de Las Banderas en 2016, había sido remozado por los normalistas, ante la cercanía del octavo aniversario de la desaparición de los 43 estudiantes, en Iguala, en septiembre de 2014.
Este antimonumento de los 43 es uno de los puntos donde se llevan a cabo mítines para exigir justicia y, al cierre de esta edición, no se ha emitido una postura de parte de la normal rural o de los normalistas.
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