Lo que inició como una protesta en la Autopista del Sol terminó en actos de violencia y vandalismo contra instalaciones militares en la capital guerrerense, recinto en donde el personal respondió a las agresiones con gas lacrimógeno y uscar contener los ataques.
La tarde de este lunes, un contingente de aproximadamente 225 autobuses con estudiantes de diferentes normales del país, acompañados de padres y madres de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, se trasladó al cuartel de la 35 Zona Militar, ubicado sobre el bulevar Vicente Guerrero.
El recinto militar, resguardado con barricadas en sus accesos, fue blanco de agresiones luego de que los manifestantes bloquearan la lateral de la vialidad y comenzaran a lanzar petardos al interior, además de realizar pintas en la fachada principal.
De acuerdo con los reportes, alrededor de las 12:30 horas personal del Ejército respondió con gas lacrimógeno para contener los ataques, mientras los estudiantes continuaban arrojando explosivos de fabricación casera.
Tras cerca de media hora de confrontación, los normalistas se retiraron hacia la Normal Rural de Ayotzinapa, en Tixtla. Posteriormente, elementos antimotines realizaron una inspección del perímetro, donde se constató la afectación en la fachada.
Al sitio también arribaron brigadas de Protección Civil y bomberos, quienes se retiraron luego de confirmar que no hubo personas lesionadas.
Se prevé que este martes el contingente continúe con su jornada de movilizaciones en el municipio de Iguala de la Independencia, donde se esperan nuevas protestas en el marco de su calendario de lucha.
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