La Selección Mexicana Femenil Sub-17 aseguró el tercer lugar en el Mundial celebrado en Marruecos, luego de imponerse a Brasil en una tanda de penales que concluyó 3-1, tras empatar 1-1 en tiempo regular. Con este resultado, el representativo nacional cierra su participación con una medalla de bronce y un desempeño que refleja crecimiento y competitividad en el futbol juvenil.
El encuentro, disputado en Rabat, se caracterizó por su intensidad durante los 90 minutos reglamentarios. Brasil abrió el marcador al minuto 78 mediante un remate dentro del área que superó a la guardameta mexicana. Sin embargo, el conjunto tricolor mantuvo la presión hasta el final y encontró el empate en tiempo agregado, luego de que un intento de despeje brasileño terminara en propia puerta al minuto 94.
Con el duelo igualado, la definición desde los once pasos fue determinante. El cuadro mexicano mostró precisión en sus cobros, mientras que la portera Valentina Murrieta destacó al detener dos disparos, asegurando la victoria en la serie y el acceso al podio.
El equipo dirigido por Miguel Gamero concluye así su participación en el torneo con una actuación sólida, evidenciando desarrollo técnico, disciplina táctica y carácter competitivo. El tercer lugar obtenido representa un avance significativo en el proceso formativo de esta generación y un impulso para el futbol femenil en categorías juveniles a nivel nacional.
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